En primer lugar, debemos determinar si las noticias que nos presentan son genuinas o no. Para identificar esto, debemos verificar si las noticias tienen una fuente creíble o si se han escrito para promover el interés de alguien o una organización en particular.
Digamos que recibe un mensaje de WhatsApp que proclama que el gobierno ha lanzado una política X para promover el interés de las personas corporativas. O, Y ha hecho un comentario de ABC sobre Z. Antes de creer en esas noticias y compartirlas en otros sitios de redes sociales, asegúrese de que dichos mensajes (noticias) tengan el enlace adjunto o la mención de alguna fuente auténtica junto con ellos. Es aún mejor visitar el sitio web oficial de la persona / organización en cuestión para obtener más aclaraciones.
Las noticias falsas suelen ser muy extremas, es decir, tienen menos probabilidades de tener un contenido moderado. En su mayoría, su contenido estará a favor o en contra de una persona, organización y partido en particular con el objetivo de difamar su reputación y derribarlos al difundir la propaganda especial en su contra.
- ¿Cuál es el criterio para ser considerado 'noticias falsas'?
- ¿Cuándo y cómo cambió el National Enquirer de ser reconocido universalmente como un tabloide de noticias falsas a ser una lectura estándar para los republicanos?
- ¿Qué son las 'noticias falsas' y por qué son un problema en las redes sociales y en los resultados de búsqueda?
- ¿La publicación de una declaración de impuestos de hace diez años es una garantía de la reciente integridad comercial de Trump?
- ¿Son noticias falsas o malas interpretaciones inocentes las que están detrás del reciente escándalo sobre la ley de "prostitución infantil" de California?
Aparte de eso, los periodistas en los tiempos de hoy ya no están libres de sus propios prejuicios personales y la distorsión y la mala interpretación de los hechos al presentar las noticias a la gente, lo que reduce las noticias a meras opiniones de ese periodista ‘X’. Por lo tanto, es muy importante identificar y boicotear a aquellos periodistas, periódicos, canales de noticias y portales de redes sociales que provocan un sesgo particular y muestran el único lado de la imagen para propagar una narrativa particular para satisfacer sus intereses creados.
Además de esto, debería haber algunas leyes estrictas contra aquellos que son declarados culpables de perpetuar las noticias falsas en múltiples ocasiones con la intención de difamar a una persona o institución y crear una atmósfera de tensión y desconfianza entre los ciudadanos al engañarlos.
Muchos sitios web y portales no hacen nada más que la difusión de noticias falsas para engañar al público en general con el fin de obtener la gran tracción en sus sitios web. Dicho sitio web debe ser prohibido al menos temporalmente si no se elimina permanentemente, para que puedan reparar sus costumbres, siempre que el organismo que les impone dicha prohibición no sea arbitrario, pero debe dar la misma representación a las diferentes partes interesadas, de modo que ellos no culpan que su libertad de expresión está siendo irrazonablemente limitada.