El trabajo de los medios de comunicación no es hacer que sus historias sean democráticas o diversas. Los medios de comunicación deben estar informados pero son independientes, y deben esforzarse por la precisión y la verdad por encima de todas las demás consideraciones. Las redes sociales son, por su propia naturaleza, sesgadas personalmente; No digo que esto sea algo malo, pero es algo más que periodismo. Su contenido se adapta mejor a las páginas de opinión que a las noticias.
Si bien las redes sociales generalmente no son una fuente apropiada para el contenido de las noticias (aparte de las historias sobre las redes sociales), los diversos foros sociales pueden ayudar a informar las noticias de alguna manera:
– Proporcionar pistas que los periodistas calificados puedan seguir de manera rigurosa.
– presentar al periodista una copia de los comentarios (gramática, ortografía, etc.)
– Crear rumores sobre una historia en particular que luego puede ser contextualizada a fondo por partidos subjetivos (blogueros, tuiteadores, juntas editoriales, redes sociales, políticos, etc.)
– llamando la atención a aquellos que afirman su imparcialidad pero tuercen los hechos para satisfacer sus necesidades
- Noticias de última hora: ¿Qué va a pasar en Libia?
- Noticias de última hora: ¿Alguna vez ha habido un gran huracán en Nueva York?
- ¿Cómo se etiquetan algunos asesinatos como 'tiroteos trágicos' que los convierten en noticias nacionales de última hora, cuando la mayoría de los asesinatos en las calles de las esquinas pasan desapercibidos?
- ¿Las noticias pueden ser objetivas?
- ¿Qué impacto han tenido las herramientas de redes sociales, como Twitter, en los medios de transmisión tradicionales, como la radio? ¿Cuál es el efecto neto de una mayor inmediatez en la entrega de noticias?
Es crucial que los periodistas sigan siendo los registradores imparciales de los eventos humanos. Las redes sociales, como la llamada telefónica o la reunión secreta en un pub local, son una excelente manera de obtener una pista, pero alguien debe estar dispuesto a verificar los hechos.