Una imprenta aquí en los Estados Unidos, Edwards Brothers, fue fundada por hermanos que comenzaron a vender sus apuntes de la facultad de derecho a fines del siglo XIX (ver página en Crainsdetroit.com). Si tiene la más mínima inclinación a hacerlo usted mismo, debe asegurarse de haber hecho las citas adecuadas y de solicitar el permiso de sus fuentes cuando sea necesario. Desea que su lector pueda encontrar y acceder a la fuente de su información. Sin conocer la naturaleza exacta de su contenido, voy a cubrir ampliamente algunos puntos. El copyright es un asunto complicado.
Si está reformulando material de Internet o libros con sus propias palabras , todo lo que necesita hacer es citar fuentes en notas al pie o notas finales (probablemente querrá usar notas al pie) e incluir una bibliografía en su publicación. Con el material de Internet, debe citar la fecha en que accedió a la información para cubrirse, en caso de que se revise el material de origen después de publicar sus notas. Si desea citar textualmente el material de los demás , y el recuento de palabras del trabajo fuente está más allá del uso justo (aproximadamente, más del 1% del recuento total de palabras del trabajo fuente), o está utilizando imágenes o poesía más recientes que en 1800 , debe solicitar el permiso del editor o curador. Las traducciones de obras antiguas podrían estar bajo copyright, por lo que debe tener cuidado. El Tao Te Ching podría estar en el dominio público en chino, pero la traducción de Stephen Mitchell no lo está. Mire la página de derechos de autor de la obra (reverso de la página de título) para ver qué derechos de autor se reclaman allí. El material de Internet debe mostrar un aviso de copyright en la página donde aparece el trabajo. Parte del material de Internet se emite bajo la Licencia Creative Commons (http://en.wikipedia.org/wiki/Cre…).
Como Todd Gardiner afirma acertadamente en su respuesta, cuando le escribe al editor el contenido que está buscando permiso para usar, dígale que se usará únicamente con fines académicos y solicite que el editor renuncie a las tarifas de permiso. Describe tu propio trabajo brevemente. Cite dónde aparece el material y muéstreles exactamente las palabras que desea volver a publicar.
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El uso de imágenes es más complicado porque el editor puede no ser el titular de los derechos de autor, a menos que la imagen o el arte se hayan realizado como un trabajo por contrato, y no siempre se puede saber simplemente mirando a la publicación quién es el titular de los derechos de autor (a menos que haya un aviso de copyright se publica en algún lugar, generalmente en un título junto a la imagen o, si está en un libro, en la página de derechos de autor, que generalmente se encuentra al otro lado de la página de título del libro). Es un trabajo pesado, pero debe ponerse en contacto con el editor de la imagen para preguntar si tienen derechos de autor y, de no ser así, si pueden proporcionarle información de contacto del titular de los derechos de autor o enviarle su consulta.
Si se encuentra con un editor que no responde, puede poner el material en sus propias palabras, ponerle una nota al pie de página y simplemente citar la fuente en una bibliografía. Con imágenes como diagramas, puede volver a dibujarlas, pero diría en el pie de imagen que está adaptada de la fuente original. O supongamos que necesita usar una imagen de una pintura famosa de antes del siglo XX. La mayoría de los libros de arte le dirán dónde se está curando la pintura y puede acercarse a ese curador si necesita una imagen de calidad de impresión (la mayoría de las imágenes de Internet están por debajo de la resolución requerida para una imagen de impresión decente, que debe ser de al menos 200 ppp, preferiblemente 300) También puede escanear la pintura de un libro y, en la leyenda de la imagen, cite dónde obtuvo la imagen. Algunos museos ya tienen sus obras en línea y descargables, con un “widget de permisos”. Recientemente descargué una imagen del Rijksmuseum y tuve que completar un breve formulario que indicaba cómo iba a utilizar el trabajo. Como lo estaba usando sin fines de lucro, no había tarifa, y el museo me dio la redacción exacta para acreditar el trabajo.
