“EL PRINCIPIO MÉTODO”
Recientemente, un cliente nos pidió que tomemos medidas y que solicitemos a los editores de sitios web que eliminen contenido sobre él en sus sitios web. Se refería a unos 10 sitios web. El contenido tiene 8 años. Las acciones legales son obsoletas porque lo que está escrito no es ofensivo. Por lo tanto, el mejor método es “rogar”.
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Sí
Solo un editor eliminó el contenido sin problemas.
Sin reacción
Algún editor no reaccionó en absoluto. Incluso escribir cartas no funcionó.
Editorial fantasma
El editor es fantasma. Es fácil registrar un sitio web / dominio con un nombre de fantasía y hasta que alguien lo pague, a nadie le importa. En estas circunstancias, no pudimos averiguar quién podría ser el editor.
Editor ficticio
En algunos casos, el editor realmente existe.
– En un caso, el propietario vive en India y ni siquiera entendió inglés.
– En otros casos, el editor ya no está a cargo, pero los datos no se actualizaron. Aún no se sabe dónde está el editor real.
– El editor existe pero había cambiado su dirección y no lo reportó.
– Un editor murió, pero pagó el alojamiento durante 3 años.
– Un editor también murió, pero tenía un alojamiento ilimitado como “blogspot” o “wordpress”.
Editorial incompetente
Este es el grupo más divertido de todos. El editor corregiría / eliminaría el contenido, pero no pudo hacerlo, porque no sabía cómo o olvidó la contraseña.
Sin decir
Algún editor dijo simplemente “No”. Tenía la sensación de que estos tipos eran irracionales e inestables. Operan sus sitios web para que otros los noten de alguna manera.
Conclusión
El “Método Beg” no es muy eficiente. Estimo la tasa de éxito entre 10 y 20%. Es solo un primer paso.
Contra “No-sayers” hay una buena oportunidad de usar presión legal. Al menos eliminan el contenido porque quieren evitar el enjuiciamiento legal.
Contra el editor fantasma y ficticio existe la posibilidad de contactar a los anfitriones. No hemos probado eso todavía.
Apéndice
9. Abril de 2015: finalmente, después de 4 semanas, uno de los editores reaccionó y solicitó 30 $ para eliminar el contenido. No verificamos si eso es legal, pero el cliente decidió pagar. Es al menos la forma más barata de cerrar el caso.