¿Se aplica la Ley de Espionaje a un periodista que filtra un secreto comercial (secreto comercial), por ejemplo, recetas secretas de Coca Cola o McDonald’s?

A2A

La Ley de Espionaje (18 Código de EE. UU. Capítulo 37 – ESPIONAJE Y CENSURA) (a) se refiere a la divulgación prohibida de información gubernamental (relacionada con la defensa, clasificada, etc.) y (b) establece sanciones penales pero no responsabilidad civil.

La Ley no se aplica a la divulgación inapropiada del secreto comercial de una empresa por parte de un periodista o cualquier otra persona.


Quizás esté pensando en las disposiciones de secreto comercial de la Ley de Espionaje Económico de 1996, 18 USC Capítulo 90 (18 Código de EE. UU. Capítulo 90 – PROTECCIÓN DE LOS SECRETOS COMERCIALES).

El estatuto más pertinente a esta pregunta es el 18 Código de EE. UU. § 1832 – Robo de secretos comerciales, que, en términos generales, prohíbe la apropiación indebida de secretos comerciales relacionados con productos o servicios en el comercio interestatal o extranjero. (Cada estado tiene sus propias leyes relativas a la apropiación indebida de secretos comerciales dentro del estado).

Asumiré que el periodista no es la información privilegiada que originalmente se apropió indebidamente del secreto comercial, sino que, en cambio, recibió ese secreto comercial y lo divulgó públicamente.

Si el periodista recibió esa información sabiendo que fue malversada, violó la Sección 1832 (a) (3) y estaría sujeto al pago de una multa o prisión por hasta diez años, o ambos más, de conformidad con el Código de Estados Unidos 18 § 2323 – Pérdida, destrucción y restitución, pérdida de cualquier producto de la apropiación indebida al gobierno de los EE. UU.

18 Código de los Estados Unidos § 1836 – Los procedimientos civiles para prohibir violaciones abordan demandas civiles por parte del gobierno para prohibir la divulgación. Que yo sepa, la Ley no permite que la compañía relevante presente una demanda civil contra nadie, por lo tanto, dicha demanda tendría que presentarse bajo la ley estatal.

Los periodistas no tienen fugas. Reciben información de quienes filtran.

Por lo tanto, si alguien tiene alguna responsabilidad en una filtración de un secreto comercial, es la persona que filtra el secreto, no el periodista. No hay ninguna ley que haya roto un reportero en su situación.

Además, la Ley de Espionaje se aplica a ciertos secretos gubernamentales, no comerciales.