¿En qué se diferencia la marcha de Alemania a Renania (1936) de la marcha de Rusia a Crimea (2014)?

Respuesta corta: muy diferente.
Motivo: derecho internacional con una dosis de diplomacia.
Analogía alternativa: Sudentenland 1936


Renania fue siempre territorio soberano alemán. Alemania puede hacer lo que quiera, pero prometió mantenerlo desmilitarizado a través del Tratado de Versalles, pero fue ambiguo sobre cuánto tiempo se suponía que debía ser desmilitarizado, ya que no había variables temporales en el tratado.

En 1936, Alemania dijo “bueno, la zona desmilitarizada es solo temporal, y decidimos que debería terminar … ahora”. La ratificación del pacto franco-soviético de 1935 por los franceses se utilizó como justificación. Otra fue la necesidad del gobierno nazi de algo para la prensa en medio de la crisis económica. En cualquier caso, el Reino Unido y especialmente Francia no tenían mucho fundamento moral para contrarrestar el movimiento y también optaron por no movilizar a sus ejércitos debido también a la economía, es decir, el costo de la movilización y la logística de una guerra potencial.


Crimea había sido de facto ruso desde que los mongoles fueron expulsados ​​hace mucho tiempo. El líder de la unión irrompible de repúblicas libres Jruschov lo transfirió a Ucrania porque la URSS parecía irrompible en 1954. También tenía sentido desde un punto de vista administrativo, ya que Crimea está físicamente conectada a Ucrania.

Rusia y Ucrania, recientemente independientes, acordaron mantener Crimea en Ucrania. Mientras que Rusia retiró lo que era suyo, la reunificación de hecho, hecho consumado, violaron claramente la soberanía de Ucrania, la invasión de jure. Esto sienta un precedente incómodo en el derecho internacional, no a través de un fallo sino en la diplomacia.


La comparación más cercana de la actual crisis de Crimea con un evento histórico es la anexión alemana de Sudentenland en 1936. Los motivos son similares, es decir, unen políticamente a las personas que hablan el mismo idioma y comparten la misma cultura. La diferencia es que Sudentenland nunca había sido parte de Alemania, mientras que Crimea era territorio “ruso”, excepto (definitivamente) de 1991 a 2014.

Para 1936, Alemania ya abandonó su democracia imperfecta y pasó a la dictadura total. Su líder ya publicó su manifiesto donde llamó a los alemanes a convertirse en la Raza Maestra mediante el exterminio y la esclavitud de otras personas.

Putin y sus semejantes, por otro lado, declararon su intención de desarrollar su país “a la manera rusa”, que si lo piensas se parece mucho a la China actual, excepto que ni siquiera se atreven a soñar con las tasas de crecimiento de China. El sistema de un partido de facto apoyado por funcionarios que aceptan sobornos que nombró, gestionó la democracia, gestionó la religión oficial, el nacionalismo, la represión moderada de la disidencia, no es el mejor futuro para los rusos. Sin embargo, no hay indicios de que vea esclavos alemanes, británicos o ucranianos trabajando en granjas propiedad de rusos. Los medios a favor de Putin utilizan el Japón actual como un ejemplo de país mononacional.

Crimea siempre fue parte de Rusia hasta 1954, cuando Jruschov se la dio a Ucrania.